El proceso de elaboración del vino desalcoholizado comienza en el propio viñedo, mediante diferentes tratamientos vitivinícolas para obtener una uva con un bajo grado alcohólico probable. Posteriormente, esta uva es sometida a una vinificación que permite obtener un vino de elevada aromaticidad y un bajo grado. WIN se elabora a partir de vinos blancos o tintos, procedentes de uvas de las variedades Verdejo o Tempranillo de viñedos situados en dos de las principales Denominaciones de Origen de nuestro país como son Ribera del Duero o Rueda. Mediante un innovador método realizado en la Planta de Deconstrucción Molecular ubicada en Valbuena de Duero (Valladolid), se separan los aromas y el alcohol del resto de componentes del vino. Se trata de un proceso a través de un sistema conocido como Columna de Conos Rotatorios mediante el cual se minimiza el riesgo de pérdida de componentes aromáticos en el vino y se extraen los aromas y el alcohol.