Pasión por la tierra
Ubicada en la localidad de San Vicente de la Sonsierra, en el corazón de la Rioja Alta, esta bodega perteneciente al Grupo Matarromera e inaugurada en 2015 busca convertirse en una de las referencias de Rioja, D.O a la que pertenece.
Esta bodega destaca por su calado subterráneo de 1.500 metros, con capacidad para 2.000 barricas nuevas procedentes de las mejores tonelerías, que permite un envejecimiento en barricas de forma natural y homogénea.
La pasión y el conocimiento vitícola de todo el equipo enológico de la bodega han permitido seleccionar sistemas de mayor verticalidad y cuidado de la uva, con sistemas de movimientos por gravedad, que permiten los procesos de fermentaciones alcohólicas, pero también malolácticas, en depósitos de gran inercia térmica, como son los del clásico hormigón.
Esta nueva bodega aterriza como eje vertebrador entre dos comunidades, entre dos ríos (El Duero y el Ebro) que fluyendo en sentido opuesto, desembocan en el mismo destino: el de un mercado acostumbrado a la exigencia y la excelencia de sus vinos, motivo que configura, con humildad, sencillez y profesionalidad, el principal y noble objetivo de esta nueva bodega riojana.